Djokovic silencia Nueva York

Ser el número 1 mundial a una distancia sideral sobre el resto provoca que Novak Djokovic caiga mal. En cada torneo importante que juega tiene la grada en contra o, mejor dicho, está a favor del rival. Si, además, el tenista que está en el otro lado de la red se llama Roger Federer, pues el serbio ya sabe que está solo contra todo y contra todos.

Al igual cómo pasó en las dos últimas ediciones de Wimbledon, Djokovic se sobrepuso al clamor popular en su contra de la pista Arthur Ashe, que aplaudía todos sus errores no forzados y todas sus dobles faltas, para ganar su segundo US Open y el décimo ‘Grand Slam’ con un tanteo de 6-4, 5-7, 6-4 y 6-4, en 3 horas y 20 minutos.

Es el tercero de la temporada para él. Sólo falló en Roland Garros porque Stan Wawrinka estuvo intratable y porque al discípulo de Boris Becker y Marian Vajda le pesó la presión de ganar en el único lugar donde nunca lo ha hecho.

La final de Nueva York, pospuesta durante tres horas por culpa de la lluvia, fue un calco de la lucha por el título en el último Wimbledon. Federer, después de perder el primer set en el que ‘Nole’ tuvo un susto al caer al suelo y producirse varios cortes, remontó siendo mucho más agresivo que su adversario. De hecho, en más de una ocasión resto en el cuadro de saque contra el mejor tenista del planeta.

El suizo, llevado en volandas por las 23.000 personas que llenaban la central del complejo de Flushing Meadows, entre ellas medio Hollywood, Robert Redford, Leonardo Di Caprio y Sean Connery, tuvo dos opciones de empatar el marcador en el décimo juego de la segunda manga. Djokovic salvó la primera con un punto directo de servicio y Federer desaprovechó la segunda con una derecha más allá de la línea de fondo.

Tendría una tercera en el decimosegundo asalto y aprovecharía la cuarta para firmar las tablas. El interrogante es si las piernas le iban a aguantar. El tercer set empezó con un ‘break’ de Djokovic, que parecía devolverle el mando del partido. No fue asi porque Roger le devolvió la rotura inmediatamente después y ponía toda la presión del mundo desde el resto.

Federer acumulaba pelotas de ‘break’ a su favor. De las 15 sólo había decantado tres a su favor. Esa estadística le podía jugar en contra en el momento decisivo. La segunda mayor rivalidad de la historia, la primera si sólo se cuentan los partidos de ‘Grand Slam’, se decidió en el noveno juego. Djokovic sí aprovecharía su oportunidad para anotarse la tercera manga después de levantar otras dos bolas de rotura.

La cabeza y el físico del suizo, como en Wimbledon, sacaron la bandera blanca. A pesar de ello, estuvo a punto de remontar un 5-2 adverso.

Sólo Rod Laver y Federer habían alcanzado las cuatro grandes finales en una misma temporada. Djokovic ha empatado ese récord en 2015, lo que le permite hoy junto a siete títulos en total, disfrutar de una diferencia de 6.600 puntos con respecto al suizo en el ranking ATP. La renta que saca el serbio a Rafael Nadal se dispara hasta los 12.375 puntos.

‘Nole’ llega a los diez grandes entorchados con 28 años. Federer, con 34, permanece desde 2012 con 17. Difícil parece que pueda mover su palmarés mientras su verdugo en el US Open esté con estos niveles de ambición y, sobre todo, teniendo en cuenta que la temporada que viene se espera otra vez la mejor versión de Nadal.