Ciclón Djokovic en Shangái

Las pistas y las pelotas del Masters 1.000 de Shangái son de las preferidas de Feliciano López. El año pasado, sin ir más lejos, alcanzó las semifinales. En la presente edición, por juego y confianza, hubiera podido igualar esa ronda. El problema fue que el sorteo del cuadro le fue esquivó porque le cruzó antes de tiempo con Novak Djokovic, concretamente en los octavos.

El serbio, que ya había derrotado a Feli en los seis precedentes anteriores, el último de ellos en la tercera ronda del US Open, volvio a hacerlo en Shangái por 6-2 y 6-3, con una suficiencia sólo propia del mejor tenista del planeta.

López, que había salido gravemente perjudicado por el orden de juego, no en vano había terminado su partido el día anterior con Dominic Thiem a las 11 de la noche hora de Shangái, aguantó los cuatro primeros juegos con el marcador parejo. Incluso dispuso luego de dos opciones de ‘break’ en el séptimo juego, cuando el tanteo reflejaba un 4-2 para el número 1 mundial.

Lo que pasa es que Djokovic no da tregua a nada ni a nadie. Ha decantado a su favor los últmos 14 compromisos y los últimos 16 sets. Si huele sangre va a por su presa y si puede acabar rápido sus partidos lo prefiere a dejarse tiemp extra en la pista que puede pagar en posteriores rondas. Además, la virtud principal del tenista de Belgrado es el resto y la mejor arma de Feli es el servicio. Las devoluci ones de ‘Nole’ se impusieron. Espera mañana en los cuartos el ganador del partido entre Richard Gasquet y Bernard Tomic, verdugo de David Ferrer.

A pesar de la derrota, el toledano, que cumplió 34 años el pasado 20 de septiembre, ocupa el decimosexto puesto en la Race 2015 y es el segundo tenista más veterano con mejor clasificación después de Roger Federer.