Cristiano Ronaldovolvió a ser decisivo en Balaídos. Como lo fue ante el Sevilla y frente al Valencia. Por no hablar de la Champions, que Bayern y Atlético aún tienen pesadillas con él. Cristiano, el que no aparecía en los días grandes, lleva 13 goles en un mes, 13 goles que son el número de la suerte del Real Madrid, 13 goles que ponen al equipo blanco al borde de la Liga y en la final de la Copa de Europa.
Sus dos tantos al Celta dejan al Madrid a un punto del título, un título que, si acaba en las vitrinas del Bernabéu, llevará la indudable firma de Cristiano, que está completando un final de temporada brutal. Mayo ya es su mes más goleador tras el doblete de Balaídos. Lleva siete goles este mes, por los seis de abril. Datos que le dan la razón a Zidane en su gestión. Una razón que le concedió Cristiano tras el encuentro.
«Se gana siempre en el final, y él ha hecho una gestión muy buena, además tenemos una plantilla muy buena y joven. Yo estoy bien, se decide todo en las últimas jornadas, y lo estoy haciendo bien, marcando goles y ayudando al equipo», dijo Ronaldo. Su pacto con Zidane le ha venido de perlas al jugador y al Real Madrid, que disfruta de la mejor versión del portugués cuando más falta hace.
Además, en Balaídos, mostró su versión más solidaria. Recuperó ocho balones, se le vio implicado en defensa y condujo contras. Dejó una punta de velocidad de 31.86 kilómetros por hora, una frescura de piernas que se apreció en jugadas como la del 0-2, en la que se desmarcó para aprovechar el gran pase de Isco y mandar la bola a la jaula.
Fue uno de los dos tiros a puerta de Cristiano ante Sergio. Los dos acabaron en la red. Máxima efectividad para un jugador que hizo su tercer gol desde fuera del área en lo que va de Liga. Su zurdazo desde la frontal le alejó de esa posición del ‘9’, del delantero centro que tanto ha ocupado este curso. Sus dos goles recordaron a tiempos lejanos, uno desde lejos y el otro llegando en carrera.
Pero desde dentro o fuera del área, el caso es que Cristiano ha anotado 13 golesen poco más de un mes, que llega a mayo y lo convierte en su mes más anotador… y que el equipo le adora. Sabedores de la importancia del partido de Balaídos, la plantilla blanca con el banquillo incluido saltaron con los goles de Ronaldo y le sepultaron bajo una nube de abrazos.
La imagen de Cristiano en el córner, tumbado, con Isco, Ramos o Casemiro abrazados a él, puede quedar como instantánea de una Liga, la foto de la unión de un vestuario en torno a un héroe, el que puede ponerle el sello a una temporada histórica en Chamartín.
Fuente: www.marca.com
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