Juan Antonio Pizzi le dobló la mano al escepticismo

Compartir:

data6179437

De una selección sobre la que caían muchas dudas en marzo pasado, a ser rebautizada como ‘la Roja mecánica’ en reconocimiento al fútbol total que practicaron los holandeses en la década de 1970, todo cambió en tres meses para Chile y Juan Antonio Pizzi, su entrenador.

Los medios y aficionados chilenos que lo criticaban por empezar su trabajo con una derrota como local ante Argentina 1-2 por la quinta fecha de la eliminatoria y luego perder ante Jamaica y México en su preparación para la Copa América, en la que debutó con otra derrota ante la albiceleste, hoy lo destacan como el artífice de ese buen fútbol que consagró a Chile bicampeón de América, precisamente contra el equipo de Lionel Messi, que anunció su retiro de la selección.

 

Pizzi, argentino con nacionalidad española, supo ganarse el respeto de quienes no creían en él ni en su proyecto, de aquellos que pensaban que tras la polémica salida de Jorge Sampaoli ya nadie le sacaría rendimiento a esta generación dorada de futbolistas, reconoce diario La Tercera en Santiago, para el cual las dudas “se acabaron tras el histórico 7-0 a México, en los cuartos de final del certamen”.

El Mercurio destaca al técnico dentro de ‘lo bueno’ que tuvo Chile en la Copa porque evidenció que al campeón de América aún se le podía sacar más partido, que sin dejar su esencia ofensiva podía manejar otras variantes que le permitieran ser un equipo más completo, y porque no se equivocó a la hora de elegir a alternantes como José Fuenzalida, Pablo Hernández o Edson Puch.

A sus 48 años, Pizzi le dobló la mano al escepticismo inicial del plantel, de la prensa y de los hinchas en cuanto a su método más relajado que el de Sampaoli, admitió radio Cooperativa, que recordó que el hispano-argentino fue escogido como “una opción de segunda línea” luego de que entrenadores como Marcelo Bielsa, Eduardo Berizzo y Manuel Pellegrini descartaron ofertas de la Asociación Nacional de Fútbol .

Ahora se resalta “su estilo europeo”, adquirido durante muchos años en el Barcelona, al que llegó en 1997 tras ser goleador con el Tenerife. En Cataluña compartió camerino con dos jugadores que hoy son considerados entre los mejores entrenadores del mundo: Luis Enrique y Josep Guardiola.

Pizzi, un exdelantero que inició su carrera a los 20 años de edad en 1988 con Rosario Central, de donde emigró al Toluca mexicano primero y después a los españoles Valencia, Tenerife y Barcelona, antes de volver a su país al equipo que lo vio nacer y retirarse en 2002 al servicio del Villarreal, donde reemplazó a Martín Palermo, tiene a la escuela catalana como su idea futbolística: posesión del balón, presión, elaboración en velocidad, ataque agresivo y explotación de las bandas.

El DT ya es otro muy distinto al que llegó a la Roja. Ahora los desafíos que vienen son mucho mayores: ir por la Copa Confederaciones 2017 y clasificar al Mundial de Rusia-2018. (D)

Sabía que era una situación muy complicada: cambio de técnico y un lío institucional. Pero la forma de superar eso era con el título.
Juan Antonio Pizzi, DT de Chile

 

Fuente: www.eltiempo.com.ec

Compartir:

Attachment

Dejar un Comentario